Me propuse usar mi cuaderno nuevo para escribir cosas productivas (al menos para mi), así que, en vista que hoy me quedé solo en casa y que practicamente sólo me dediqué a hacer "cosas de casa", lo único que escribí en el cuaderno fue algo sobre la introdución de mi tesis de maestría y algo que lei en el libro de Job capítulo 1.
Lo que me quedó despues de leer Job, fue que Dios te puede "quitar" las cosas que amas a pesar de que seas "perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal" (vr. 8) a juicio del mismo Dios, esto fue como golpearme contra la pared. No es que no había pensado en eso antes, sino que ahora me encontraba en una situación especial. En estos días no me he venido comportando muy bien que digamos, he utilizado cosas y circunstancias que Dios me dio para hacer cosas que no le agradan, así que vino a mi un viejo pensamiento "en qualquier momento Dios me las va a quitar para disciplinarme y enseñarme". Debo confesar que más que las razones y finalidades del porqué me quitaría esas cosas, me preocupaba el hecho mismo que me las quitaría!!! Así, al ver a Job como alguien totalmente opuesto a lo que he venido siendo en estos días y a quien aún así se le quitó lo que tenía y amaba, aumentó mi preocupación de perderlo todo (aunque sólo perder mi laptop ya sería suficiente desgracia para mi, jaja).
Pienso que el problema no está en el hecho de perder las cosas, sino en mi actitud ante la pérdida. Como no soy Job, sólo pienso que sería una total desgracia y me da miedo, mientras que Job dijo: "Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito" (vr. 21). Creo que debo ser mejor, no para que me vaya mejor, sino para que siga siendo mejor aún cuando eso no ocurra (...yo me entiendo, jaja).
"En todo esto no pecó Job ni atribuyó a Dios despropósito alguno" (vr. 22).
